sábado, 27 de junio de 2009

Como aquella noche

Los dioses que fundaron el mundo son irracionales y no se parecen a nosotros, Amor.
Por éso este pez de oro que anida en tu pecho
me pone absorta como si fuera la primera vez que lo hicieramos a escondidas de ellos...

Recuerda que bebimos de sus estambres hasta el vértigo y la extenuación,
cuando la sed de desierto
anegaba la lluvia
con que el deseo nos abrumaba de cardúmenes brillantes,
como aquella noche en Saigón.

(Y luego nos dicen que somos inmortales.)

*Alicia Benítez Inés-

4 comentarios:

  1. Hola!!!! es la primera vez que te visito... vengo de una pagina en común... Lilya...

    Me encanto, voy a seguirte...

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  2. HOla, amiga. Lilya es palabra mayor en poesía!!! BIENVENIDA

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  3. HOLA COMO ESTAS PASO PARA INVITARTES A QUE PASES POR MI BLOG Y VEAS COMO VAN LOS VIDEOS ADCHALLENGE, SE QUE TE ENCANTARAN....

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  4. Gracias, De las imagenes... Pasaremos a visitarte con todo gusto. Un abrazo.

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