Lo que vos haces con la diestra, yo multiplico, electrizo y regodeo con mi siniestra, jaja.
Me cortaron la mano derecha sin notar, en su urgencia de ratas, que soy ferozmente ambidiestra.
Ayer vinieron por mi mano izquierda, pero ya los gérmenes habian crecido durante la noche nónica. Los vi retirarse mas decepcionados que vos;
Pero vos, que sos miedoso y olvidaste los guantes, no te atreviste a hacer con las dos manos, lo que yo hago ahora con mis pies, bajo la manta...
Sabes que no estoy sola.
-Jaja, pobre de vos, humanoide con intenciones de felino.-
Adonde vas con ese falso armiño sobre el cuello? Mirá que sos coqueto: tanta ceremonia para después claudicar a mis colmillos noctambulos, a mis alas negras de plata, a mi sed de siglos
- Sentir que este hilo púrpura se irá poniendo caudaloso como arroyo entre las piedras... no te inquieta un poco?-
Yo estaría muerto de miedo si olvidara mis guantes, aunque a veces las manos no nos alcancen para nada, vestidas o desnudas, vivas o muertas...
ResponderEliminarUn abrazo
Marian
bueno, con este relato, me vas demostramdo cuanto te gusta lilith, la negra, que es la luna en babilonia y luego los hebreos la tomaron para crear su historia
ResponderEliminarAsi es, siempre las mujeres hemos sido lunares y algo border en las cosmogonías... Mmm, creo que invocaré pronto a Gilgamesh
ResponderEliminarjajaj, Marian; las manos son solo dos, dicen...Y èste tema de los hemisferios cerebrales actuando divorciados, a veces.
ResponderEliminarAmbidiestra siniestra jejeje
ResponderEliminarMuchos besos, mi santísima
Pronto seré una trinidad... ejjeje. Broma de mal gusto, pero espero sea compartida, usted sabe de mi humor trifurcado, verdad???ah?ah?
ResponderEliminarmuchas veces la derecha es más siniestra que la ambidiestra, aunque lo más inquietante es saber intenciones de que tipo de felino tiene el humaniode injuriado y violado...
ResponderEliminarjeje
saludos desde argentina..